La Seguridad del Estado amenazó a la periodista independiente Yunia Figueredo Cruz, con "fabricarle" una causa penal por el delito de peligrosidad.
“Hace unos días atrás, una patrulla se paró frente a mi casa con un oficial, dos mujeres vestidas de policía y el chofer y me amenazaron de que yo no podía salir de mi casa ese día ni el otro. Hace dos días vienen dos oficiales aquí y me traen una citación oficial para presentarme el lunes 23 en una estación de policía para entrevista”, relató a Martí Noticias.
Figueredo es la directora del medio comunitario Amanecer Habanero, perteneciente al Instituto Cubano por la Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP), asentado en Miami.
“Dije que no me iba a presentar, no firmé la citación y no fui. Ahora, intentaron hacer llamadas a mi teléfono por número privado, pero como no contesté, llamaron al celular de mi esposo. Él contestó y le dijeron que me iban a abrir un expediente de peligrosidad, porque yo represento un peligro para la sociedad", explicó.
Su esposo, el escritor Frank Correa, que se desempeña como periodista, también fue advertido por los agentes policiales de que podría sucederle algo similar: "no está fuera del problema, porque anda en lo mismo que tú".
El ICLEP condenó el acto de las fuerzas represivas del régimen, calificándolo como un "chantaje político, encubierto como procedimiento legal".
La organización que tiene sedes en diferentes provincias cubanas aseguró que la acción "constituye una grave violación de la libertad de prensa, del debido proceso y de los derechos fundamentales, y evidencia el carácter sistemático y arbitrario del aparato represivo cubano"
Asimismo, llamó la atención de que "la intimidación no se limita a la periodista, sino que se extiende a su familia, lo que refuerza el perfil totalitario del régimen".
Desde que Yunia Figueredo asumió la dirección de Amanecer Habanero, la policía política ha incrementado la vigilancia policial en las afueras de su vivienda, ha restringido su libertad de movimiento mediante avisos ilegales, la ha citado a estaciones policiales para interrogarla y ha empleado la intimidación también contra su familia.